Existe una fábula entre una liebre y una tortuga. Ambas se retan en una carrera. La liebre tiene de su lado una excelente cualidad, la velocidad. Pero aun así, ¿le será suficiente?
La tortuga en cambio no posee esta habilidad, es más, por su propia naturaleza, es torpe y lenta. Aun así acepta el reto.
¿Quién crees que gana?
La tortuga gana la carrera:
• identifica oportunidades en el camino, ( pequeños atajos)
• mantiene el control del gasto (dosifica el consumo de energía)
• posee experiencia (contacto con el mundo real)
• planifica los tiempos, realiza una estimación en tiempo del recorrido hasta la meta.
La liebre pierde la carrera:
• El exceso de confianza le distrae del objetivo,
• Se despreocupa de su adversario, al saber de su capacidad y rapidez,
• Tantea el terreno y se pierde intentando encontrar el camino adecuado. Prueba de ensayo y error
• Alcanza la meta pero no sin dificultad y lentitud.
Sólo las personas que son capaces de transformas sus conocimientos y experiencias pasadas en resultados prácticos, alcanzan sus objetivos y el éxito en todo aquello que emprenden.
Laura Alcaraz Escribano
Dto. Desarrollo
Recursos Humanos Acciona S.A,