Esta digitalización de nuestra sociedad creará nuevos puestos de trabajo pero, al mismo tiempo, provocará la desaparición de muchos otros cuyo objetivo último dejará de tener sentido. No obstante, existen sectores de la actividad económica que están muy en boga en la actualidad a la hora de planificar la búsqueda de un nuevo empleo.
Todo esto es ahora posible gracias a la progresiva recuperación de la productividad, que está provocando una mayor demanda de profesionales en distintos sectores de la economía, en los que se buscan perfiles de trabajadores con nuevas capacidades profesionales que vayan especializándose paulatinamente, incluso en profesiones poco cualificadas.
Alta demanda de puestos STEM
El grueso de las actividades remuneradas se encuentra, sin lugar a dudas, en manos de profesionales cuya formación va íntimamente relacionada con la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas. Los conocidos como perfiles STEM, acrónimo anglosajón de Science, Technology, Engineering, Mathematics, aglutinan uno de los sectores que más empujará la demanda de empleo en la actualidad. Las empresas reclaman de forma creciente y urgente profesionales con estos perfiles para afrontar nuevos retos, aunque su gran hándicap son las enormes dificultades que tienen para encontrar talento altamente especializado en estas materias. Algo que también ocurre en sectores como la banca y la consultoría de negocio.
Algo parecido sucede en el sector de las TIC y las Telecomunicaciones, que agrupa la mayor cantidad de nuevos perfiles laborales, es decir, empleos que hace unos años ni siquiera existían. Se trata de un sector que no para de expandirse y ofrecer nuevas oportunidades laborales y en donde se busca una alta demanda de puestos tecnológicos para empresas y start up que quieren cubrir el creciente negocio de las bases de datos, las telecomunicaciones y el big data.
Junto a estos, destaca también el crecimiento dentro del sector industrial, especialmente en áreas como la automoción, o ramas como la agroalimentaria y la farmacéutica, así como la de bienes de equipo. Todas ellas, áreas que suponen uno de los sustentos básicos para cualquier economía mundial.
Asimismo, el sector servicios generará también gran parte de las nuevas contrataciones, puesto que abarca industrias como el turismo, la hostelería, la rama sanitaria y del bienestar, el comercio y el consumo, los seguros, la banca o el sector financiero.
El e-commerce estimula la logística
La Logística es otro de los sectores en los que más ocupaciones se están creando en la mayoría de economías avanzadas del mundo. El indiscutible avance de las compras online ha provocado su resurgimiento. La tecnología está provocando un cambio de tendencia en la adquisición de productos por parte de los consumidores, lo que ha generado este incremento de oportunidades de empleo dentro del sector.
También, el sector energético, dentro del conjunto económico mundial, se ha convertido en otro de los pilares para la recuperación del empleo tras la crisis vivida, aportando un gran apoyo como elemento dinamizador. La nueva cultura de compromiso ambiental, dirigida a una economía baja en carbono, ha impulsado, de nuevo, la inversión para la investigación y el desarrollo de proyectos de energías a partir de fuentes renovables y, con ello, la búsqueda de profesionales que dominen la materia y cuenten con una destacada experiencia internacional.
Por último, el sector de la construcción también inicia un periodo al alza y creará grandes posibilidades de empleabilidad junto al sector inmobiliario, que también empieza a acelerar el número de contrataciones, ayudando a que las tasas de empleo crezcan considerablemente.
Sin duda, el gran cambio está a la vuelta de la esquina y adaptarse a los sectores pujantes siempre es una baza ganadora. La transformación será continua y aquello de “los trabajos para toda la vida”, quedará como un simple recuerdo lejano.
Fuentes: ManpowerGroup, OCDE, Hays